Esta es la pregunta más planteada desde que la crisis del coronavirus apareciese en nuestras vidas. La alarma social y la incertidumbre generada, junto a los acontecimientos que se iban sucediendo, obligaron al aplazamiento del XV Congreso de Detectives Privados que, con tanto esfuerzo y dedicación, había sido organizado por la APDPE para llevar a cabo el pasado mes de marzo. Estaban previstas una serie de ponencias y otro tipo de actividades, que no sólo abordaban temas interesantes, sino que además iban acompañadas de profesionales de reconocido prestigio dentro del sector. La organización, calidad y variedad estaban garantizadas.
Nuestra responsabilidad como detectives privados se mantiene constante, así como la ilusión por rescatar todo ese esfuerzo y trabajo realizado. Es por ello que, después de una profunda deliberación, la Junta Directa de la APDPE publicó hace unos días una nota informativa a sus asociados para anunciar la celebración del susodicho congreso los días 17, 18 y 19 septiembre de 2020 en Palma de Mallorca , reservando el sábado para la Asamblea Ordinaria.
Manteniendo como tema vehicular del congreso “Detectives Privados: Compromiso Social” , se llevarán a cabo las medidas necesarias para cumplir con la normativa vigente dictada por las autoridades sanitarias y poder asegurar, así, la seguridad y tranquilidad de todos los asistentes dentro de lo que es, y será probablemente durante mucho tiempo, la nueva normalidad .
Las sociedades avanzan y evolucionan a ritmos exponenciales, dando lugar a nuevas realidades, situaciones, conflictos y tipos delictuales. Poco a poco van apareciendo nuevas formas de recibir, comunicar y ocultar información, así como de relacionarse personal e interpersonalmente. Pero pese a estos cambios, la función de los detectives privados hacia el conjunto de la ciudadanía se mantiene constante. Según el Ministerio del Interior a través de la Investigación Privada (Ley 5/2014) se realizan averiguaciones que aportan las evidencias necesarias sobre determinadas conductas o hechos privados. Y cuando hablamos de Investigación Privada hablamos directamente del trabajo y la figura del detective privado.
Teniendo en cuenta lo dicho hasta ahora, no es un error afirmar que el trabajo del detective privado se vuelve cada vez más complejo a medida que estos avances se producen, especialmente en el ámbito industrial, científico y tecnológico, siendo necesarias nuevas técnicas para abordar los casos presentados, entre los que siguen destacando los relacionados con el ámbito personal-familiar y con el laboral-empresarial. En el primero de los casos no sólo nos referimos a infidelidades, tal y como las películas y obras de ficción detectivescas nos han hecho creer a lo largo de décadas, que han hecho distorsionar la idea de lo que es el trabajo de los detectives, sino también a casos mucho más enrevesados e interesantes como son los de paternidad biológica, desapariciones, regímenes de visita, herencias… En el segundo de los casos nos referimos especialmente a fraudes, bajas fingidas, problemas en la productividad de los empleados, evaluación de la satisfacción del cliente y otros. Otras áreas en las que el detective privado desempeña sus funciones pueden ser la económico-financiera (quiebras, deudas, embargos, incumplimientos de contratos laborales…) y/o la técnico-informática (peritajes, barridos electrónicos, verificación de siniestros de tráfico…).
Para poder ejercer como detective privado, además de la formación universitaria obligatoria exigida en nuestro país (el más restrictivo de la Unión Europea), se necesitan también un conjunto de habilidades multidisciplinares entre las que destacan principios y valores como la objetividad, legalidad, confidencialidad, profesionalidad y, sobre todo, la empatía. Porque al fin y al cabo lo que se busca es dar solución y/o respuesta a demandas sociales provenientes de diferentes sectores de la población. En este sentido se incluyen aquí dos características que todo buen detective privado posee: vocación de servicio y compromiso social.
Muchas veces no se tiene una respuesta clara a la pregunta sobre el trabajo que realiza un detective privado. Y es que éste no trabaja con algo tangible, sino con pruebas, evidencias y hechos, por lo no es una ciencia exacta. Por eso, para entender mejor la función social del detective debemos dejar de preguntarnos cuál es el trabajo de un detective privado para preguntarnos dónde se ve reflejada su labor social.
El impacto social del detective va mucho más allá de lo que se puede pensar al responder la primera de las preguntas: sus aportaciones pueden ayudar a resolver casos de desapariciones, corrupción, fraudes, malos tratos, incumplimiento de contrato, bajas fingidas y engaños, entre otros. Nadie puede ni quiere imaginar el dolor de una familia al desconocer el paradero de un familiar, o el de unos padres que no saben si sus hijos están siendo o han sido maltratados de alguna forma. También es muy difícil llegar a comprender la incertidumbre e inseguridad de una persona que sospecha de que está siendo engañada o vigilada por alguien de su entorno. De la misma forma, todo aquel que tenga una empresa a la que dedica toda su vida querrá tener trabajadores comprometidos, que no engañen, finjan bajas, incumplan contratos, roben o cometan cualquier otra falta o delito. Nadie quiere ser engañado, por eso todos entendemos el enfado que se siente cuando sale a la luz que determinados partidos y/o políticos han sido corruptos o han ocultado o manipulado información de algún tipo. Así, el detective además de resolver casos particulares también sirve de gran ayuda para colaborar en el trabajo de las FFCCSE, bajo los principios de complementariedad y subordinación de la seguridad privada respecto de la seguridad pública.
La profesión del detective privado es mucho más compleja y completa de lo que en un primer momento podamos pensar. Su función está enfocada a la ayuda social y a resolver todos aquellos conflictos que en algún momento puedan paralizar nuestra vida. Debido a su importancia, el compromiso social del detective privado ha sido elegido como el tema vehicular del XV Congreso Internacional de Detectives Privados de la APDPE, que tendrá lugar en Palma de Mallorca los días 26, 27 y 28 de marzo de 2020, y al que acudirán numerosos profesionales del sector de la Seguridad Privada.
Diversos estudios justifican que su alta fiabilidad (entre un 85% y un 95% según instituciones internacionales como Standford o la Agencia Nacional de Seguridad de EEUU) se debe a la detección simultánea de los cambios fisiológicos producidos en el sistema nervioso del sujeto cuando éste responde a ciertos estímulos en el entorno que, en el caso de la mencionada máquina de la verdad, se corresponden al cuestionario elaborado previamente por el encargado de dirigir la prueba (una persona con formación específica también llamada poligrafista ). Es decir, ante la pregunta A se producirá una respuesta fisiológica B (desviamiento de la mirada, ritmo cardíaco, respiración, movimiento de manos, tiempo de respuesta, etc.) que será analizada mediante determinados parámetros.
El examen del polígrafo se lleva a cabo en diferentes pasos. El primero de ellos consiste en explicar al entrevistado el funcionamiento del aparato y de la prueba. A continuación, se le realizan las preguntas del cuestionario, unas más intuitivas que otras, y pensadas para ser respuestas mediante “sí” o “no”. Mientras éstas cuestiones se formulan, las constantes vitales del sujeto están siendo grabadas y controladas. Finalmente, se analizan las respuestas obtenidas y su relación con el comportamiento fisiológico observado. El examen tiene una duración aproximada de dos horas, incluyendo la explicación del procedimiento y el análisis de los resultados. Cabe decir que la prueba sólo puede llevarse a cabo mediante la autorización expresa del entrevistado, que accede a pasar el examen y a que sus respuestas fisiológicas sean monitorizadas hasta que éste finalice.
El ámbito de uso del polígrafo se divide entre el uso particular – familiar y el empresarial – profesional. Basándonos en que el objetivo principal es la detección de la mentira, los exámenes llevados a cabo buscan resolver infidelidades, engaños, acoso/abuso sexual y/o físico en familiares, conocidos o compañeros de trabajo, comportamientos de riesgo (como por ejemplo consumo de drogas), lealtad y fidelidad de los empleados, posibles fraudes, etc. Muchas empresas de rango internacional usan esta técnica para complementar la selección de altos cargos y el seguimiento de los mismos, llegando incluso a aparecer su uso periódico en algunas de las cláusulas de los contratos laborales. Pero pese a su amplio abanico de posibilidades, cabe apuntar que hay dos perfiles de sujetos que no pueden ser sometidos a la prueba del polígrafo por alterar la veracidad de los resultados: aquellas personas bajo los efectos de determinados fármacos y las que sufren algún tipo de psicopatía. Los menores de edad pueden pasar el examen siempre y cuando cuenten con la autorización expresa de sus tutores legales.
Aunque en España la prueba del polígrafo no tiene validez jurídica como sí la tiene en otros países como Estados Unidos, sigue siendo una prueba muy útil por la alta veracidad que aporta. De hecho, es la segunda prueba más fiable en la detección de mentiras superada solo por la del ADN, con un porcentaje del 99’9%. Pese a ser una prueba de carácter indiciario, su alta veracidad la convierte en un análisis eficaz y beneficioso cuyo uso seguirá aumentando en los próximos años con total seguridad.
La pericia caligráfica equivale a un conjunto de técnicas enfocadas al análisis y verificación de diferentes tipos de grafías y/o documentos, especialmente firmas, con el objeto de identificar su autoría. La investigación pericial es necesaria tanto en el ámbito privado como en el judicial (derecho civil, penal y laboral), donde los informes calígrafos aportados son cruciales.
Habitualmente confundidos, hay que distinguir al experto calígrafo del grafólogo. Éste último se encarga de analizar y señalar determinados rasgos de la psicología y personalidad del autor a través del análisis de su escritura. En el presente artículo nos centraremos en la figura del experto calígrafo, que tiene como objetivo principal determinar la autenticidad y la autoría de un texto mediante determinadas técnicas y procedimientos que muchas veces incluyen el uso de herramientas específicas tales como microscopios, cámaras y fuentes de iluminación de alta precisión.
El procedimiento a seguir por un perito calígrafo puede variar de un caso a otro, pero siempre se parte de la misma base: es necesario tener un número considerable de textos y grafías dubitadas e indubitadas, con tal de poder cotejar y equiparar las dos con la mayor exactitud posible. Tal y como su nombre indica, indubitado es aquel texto o documento respecto al que no hay ninguna duda sobre su autoría: es original y auténtico. A lo largo de este procedimiento de verificación es interesante tener al alcance diferentes muestras pues la escritura, aunque inconsciente y psicológicamente inmodificable, está sujeta a diferentes factores externos que pueden producir pequeñas alteraciones. Por ejemplo, si queremos cotejar la firma dubitada de un documento es interesante y útil poder comparar la misma firma realizada en diferentes entornos y momentos. Lo imprescindible es que, como mínimo, se trabaje siempre con un documento original, con tal de poder alcanzar la mayor fiabilidad posible.
Durante el análisis calígrafo se analiza la muestra en general pero también se realiza un estudio minucioso de diferentes factores relacionados con la forma y realización de las muestras, como las posibles alteraciones en el trazo y en la presión ejercida, proporcionalidades, espontaneidad… Mediante este análisis se pueden investigar la falsificación, alteración y/o copia de todo tipo de texto escrito, como firmas, testamentos ológrafos, documentos oficiales y particulares. También se puede incluir dentro de las funciones abarcables del perito calígrafo el estudio de textos de difícil comprensión y redacción complicada y el estudio de aquellos textos mecanografiados que hayan podido ser alterados de alguna manera tras su redacción. Tras realizar la investigación oportuna, el perito calígrafo se encarga de elaborar un detallado informe que sea objetivo y claro, que incluye una explicación de las pruebas realizadas y herramientas utilizadas. En este informe es donde el experto dictaminará la verificación o no de la autoría o la imposibilidad de conclusión final. En este último caso es necesario aportar todas aquellas dificultades que han impedido la verificación o no del documento dubitado.
Los expertos calígrafos suelen provenir de una formación diversa, aunque lo más común y lo más óptimo es que tengan aparte de alguna formación en pericia caligráfica algún tipo de formación en derecho, investigación privada o criminología. Es complicado encontrar especialistas calígrafos en las Islas Baleares, pero en UNIdet Detectives Privados contamos con experiencia y formación en esta técnica, a la que nos dedicamos a través de unos valores básicos: la protección y defensa de la identidad personal.
Pese a estar enfocado al ámbito de la seguridad privada, no hace falta ser un profesional del sector sino que cualquier persona interesada puede presentarse al certamen, siempre que tenga nacionalidad española y sea mayor de edad. De esta forma, el público al que se dirige el concurso es muy amplio: no podemos olvidar que gran parte de los problemas en los que se centra la investigación y actuación del detective privado son de carácter social y afectan, por tanto, a toda la población.
Se admiten originales hasta el 31 de enero de 2020 a las 24:00h y serán evaluados por un jurado compuesto por 5 miembros de APDPE y PG Ediciones. Los tres relatos mejor valorados por dicho jurado serán premiados de la forma siguiente:
- Primer Premio: 300€, placa honorífica y seis ejemplares de la antología editada.
- Segundo y Tercer Premio: placa honorífica y cuatro ejemplares de la antología editada.
Se darán a conocer los ganadores por fallo del jurado, que será inapelable y que se hará público en Palma de Mallorca el día de 25 de marzo de 2020 en el Hotel Amic Horizonte , un día antes del inicio del Crongeso de la Asociación.